Llegó el día, ese donde uno se pone ansioso, porque hay que cambiar el auto o comprar el primer bólido. Cuando nos decidimos a comprar un vehículo usado hay muchas variables que debemos considerar y la primera de ella, sin duda, es cómo lo pagaremos.
Si quieres comprar un auto nuevo al contado, también te encontrarás con programas de financiamiento de parte de las concesionarias de las marcas de auto que hay en Chile. Así, puedes elegir cómo será mejor pagar el auto.
¿Quieres un auto usado? Asegúrate con el Informe Autofact que todos sus antecedentes están limpios y en orden.
Respecto de comprar un auto nuevo con crédito o algún financiamiento alternativo, te puedes encontrar con créditos automotriz convencionales, créditos de libre consumo, créditos inteligente y leasing, entre otros. Todos ellos con sus condiciones y letra chica respecto de intereses y comisiones.
En palabras simples, los créditos piden un pie, que ronda el 20% del valor del auto, para luego establecer el restante del pago en cuotas. Hay otros que no piden pie, pero tienen más cuotas y más caras. En cualquiera de los dos casos, las cuotas habrá que pagarlas por los próximos 2, 3, 4 o más años y todos los meses.
Si bien, no haces un gasto de forma inmediata de una gran suma de dinero, lo que ocurrirá es que estarás pagando una deuda por un par de años como te dijimos y además, si sumas las cuotas y el pie, si es que diste uno, te encontrarás con que el precio final que habrás pagado es un 20% o más del precio de lista del auto.
Esto ocurre de la misma forma si es que compras un auto usado con crédito automotriz, entregado por un banco o por algún convenio de la concesionaria de compraventa. Como la naturaleza de cualquier crédito está en las cuotas, el interés y el valor final del crédito, siempre pagarás el valor del auto sobredimensionado, pero en cuotas.
En cambio, si compras un auto al contado, debes considerar varias cosas. Primero, hay que preguntarse si vale la pena la inversión o no. Hay que tener claro que cualquier auto pierde su valor con el paso del tiempo y los kilómetros.
Así es, la depreciación del valor de un auto es una realidad, por lo que es mejor que consideres un vehículo como un bien de consumo y no como una inversión.
El auto será algo que con el uso y las condiciones del mercado irá perdiendo su valor, salvo casos muy excepcionales, como los autos clásicos que algunos valen mucho más que su precio original.
Más allá de si necesitas un auto o hacer cualquier otro gasto grande, debes preguntarte si estás en condiciones de gastar, 5,7 o 10 millones de una sola vez.
¿Tienes más deudas que pagar? ¿Estás ahorrando para las vacaciones? Si es así, pon en una balanza si es mejor usar esa plata que podrías destinarlas a otras cosas en lugar de comprar un auto al contado.
Ahora si es que ahorraste exclusivamente para comprar un auto al contado, entonces podría ser una buena opción hacerlo, puesto que pagando su valor ya no te preocupas más de ninguna deuda.
Eso sí, cuando pagas un auto al contado en una concesionaria pierdes los precios que incluyen bono y otros beneficios. Cuando pagas con crédito, te incluyen bonos de descuento y podrían agregar el pago de la patente y otros costos asociados. Es importante que, con calculadora en mano, evalúes qué te conviene más en el mediano plazo.
Si pagas un auto al contado usado a un particular, entonces ahí tu inversión será el valor del auto y los costos de transferencia del vehículo. Si te consigues un crédito con el banco para comprar un auto usado, deberás pagar el valor del auto sobredimensionado, pero en cuotas y con intereses… finalmente, tú eliges…
Pensando en que comprar un auto usado al contado siempre será un gasto, lo interesante es hacer que ese gasto sea eficiente, que no genere otros gastos y que a la vez nos genere el mayor retorno posible; o siendo más realista, que no nos haga perder tanto con el paso del tiempo.
Entonces, ¿qué aspectos debo considerar para gastar bien mi plata? Bien, lo primero que debes tomar en cuenta es el tipo de vehículo que quieres, para qué lo quieres e inclinarte por una marca y modelo de buena reventa en caso que quieras venderlo a futuro.
Si ya sabes más o menos qué modelo de vehículo busca, entonces revisa:
Quizás ya elegiste marca y modelo, o al menos tienes un par de alternativas en mente. Revisa sus precios, si es que puedes o no pagar una cifra así al contado y cotiza los que más te gusten.
Cuando encuentres avisos que te interesan, verifica la patente y si no está tendrás que llamar al dueño. Con la patente puedes revisar el Informe Autofact del vehículo, el cual reúne todos los antecedentes que debes saber para comprar un auto usado al contado y hacer un buen negocio.
Además del kilometraje, historial de todo tipo de multas y deudas, de recalls informados y revisiones técnicas, verás quiénes fueron sus dueños. En estos casos puedes saber si un vehículo usado fue usado como taxi, medio de transporte laboral o en alguna ciudad con caminos o clima adverso.
Si ya revisaste todo lo anterior y aún tienes interés por el o los modelos que viste publicado, entonces es hora de ir a verlos en persona a ver lo siguiente:
Es muy importante preguntarle al dueño si le ha hecho las mantenciones de forma regular y a la vez verificar que el vehículo que comprarás al contado esté en óptimas condiciones, pues si estás gastando una gran suma de dinero, lo ideal es no pagar arreglos en el corto plazo, solo sus mantenciones preventivas.
A la vez, cuanto menos dueños haya tenido un vehículo será mejor. Con menos dueños, se respeta mejor un estándar de mantención, mientras que si pasaron muchas manos, todos habrán mantenido el vehículo de formas diferentes, atentando contra la vida útil y la reventa del vehículo.
¿Quieres un auto usado? Asegúrate con el Informe Autofact que todos sus antecedentes están limpios y en orden.